«Una nueva estrella», Héctor Ruiz de la Fuente – Premio Especial Infantil «Fomento del Trabajo en Equipo»

Antonio era un niño que le gustaba mucho el fútbol, pero por los pocos recursos que tenía su familia nunca pudo jugar en un equipo federado.

Una vez estaba con su abuelo jugando al fútbol en la plaza millan santos y, de repente, llegaron cinco personas más mayores que él, a quienes se les daba muy bien jugar al fútbol. Antonio se quedó deslumbrado por su juego.

Después de unas horas viéndolas jugar, decidió acercarse a ellas y les preguntó:

–¿ jugáis en algún equipo?

–Sí, jugamos en el Betis de Delicias –contestaron.

Antonio les preguntó si podía ir a hacer unas pruebas al Betis.

–¡Por supuesto! –le respondieron.

Después de unos días, Antonio decidió animarse a hacer las pruebas y, sorprendentemente, le dieron la beca y le cogieron para el equipo regional porque ya tenía trece años.

Tras dos meses de entrenar con el regional, llegó su primer partido. Empezó en el banquillo y su equipo iba perdiendo por 1-0. El equipo estaba desmotivado porque, si perdían ese partido, descendían de categoría. El Betis jugaba contra el Valladolid, así que todas las familias estaban muy intensas porque no querían descender de categoría y animaban mucho a su equipo, en especial los padres y el abuelo de Antonio, que aunque este no jugaba, se sentían una piña con todo el equipo.

Llegó el momento de Antonio. El entrenador se acercó a decirle que entraría y que confiaba mucho en él. Cuando por fin entró, la afición le recibió con muchos aplausos, sobre todo, el que más aplaudió fue su abuelo. En el minuto 82, Antonio se metió en el área con el balón controlado, se fue del primer defensa y del segundo no pudo porque sintió que su pierna se enredaba con la pierna del rival. El árbitro en esa jugada dictó penalti. Sus compañeros se alegraron mucho y le fueron a abrazar.

El abuelo de Antonio estaba muy animado porque sabía que su nieto tiraba muy bien los penaltis, pero el entrenador decidió que lo tirase su buen amigo Cristian, que siempre tiraba los penaltis. Cristian lanzó el penalti y lo marcó.

En lo que parecía la última jugada del partido, el Valladolid sacaba una falta en el medio del campo. Su portero subió a rematar el balón. El Valladolid, en vez de colgar el balón al área, decidió sacar en corto, y Antonio, que estaba muy astuto, se la robó al defensor del Valladolid y recuperó el balón en haciendo una segada limpia, y ahí empezó la contra del Betis. Antonio decidió cederle el balón a Cristian, que estaba a su lado, y este avanzó con el balón sin contrarios y disparó a portería vacía.

¡Gooooool!

La afición coreaba el nombre de Antonio y de Cristian y al final el Betis se quedó en regional gracias a la gran participación de Antonio en su debut

Cuando acabó el partido, Antonio no se lo podía creer y, de camino a casa, se encontró a las cinco chicas que le habían inspirado para unirse al Betis y le felicitaron por su gran partido en su debut.